*“Son 25 años de compromiso, trabajo constante y de esfuerzo colectivo para hacer de éste, un espacio de reflexión, acción y conciencia ambiental”: Blanca Liliana Diaz, presidenta del Voluntariado de la UdeC, en nombre del rector.
Este viernes inauguraron la exposición fotográfica Visiones Naturales, un llamado a la reflexión sobre la importancia de conservar la naturaleza a través del arte, la ciencia y la educación ambiental, en la ex Hacienda de Nogueras, Comala.
Con este evento inician las actividades por el 25 aniversario de creación del Centro Universitario de Gestión Ambiental (CEUGEA) de la Universidad de Colima, y se enmarca además en el Día Mundial del Medio Ambiente. A nombre del rector, Christian Jorge Torres Ortiz Zermeño, Blanca Liliana Díaz Vásquez, presidenta del Voluntariado, fue la encargada de inaugurar esta expo.
Estuvieron en presídium Xóchitl Angélica R. Trujillo-Trujillo, coordinadora general de Investigación; la directora del CEUGEA, Cintia Karina Rojas Mayorga, directora del CUGEA; el arquitecto Francisco Cárdenas Munguía, primer director de este centro y Ana Luz Quintanilla Montoya, exdirectora de dicho centro.
El CEUGEA fue creado por la UdeC para ser un espacio de análisis y propuestas para la solución holística de los problemas ambientales locales, regionales, nacionales e incluso internacionales, objetivos que han sido atendidos en estos 25 años a través de espacios de diálogo y las distintas modalidades de formación.
Blanca Liliana Díaz señaló que, más que celebrar un aniversario, “celebramos un legado; son 25 años de compromiso, de trabajo constante y esfuerzo colectivo para hacer de éste un espacio de reflexión, acción y conciencia ambiental; aquí se han sembrado ideas, se han cultivado valores y se ha cosechado conocimiento que impacta no solo a nuestra comunidad universitaria, sino también a nuestra sociedad colimense”.
Al inaugurar la exposición, Blanca agradeció a las y los artistas por compartir su mirada “y por ayudarnos a entender que la fotografía también puede ser una herramienta de transformación social. Ésta no solamente es una muestra de arte, sino también de educación y sensibilidad, es una provocación para la conciencia. A través de cada imagen, se nos recuerda por qué vale la pena cuidar lo que tenemos, defender lo que amamos y actuar con responsabilidad ante el medioambiente”.
En estos 25 años, dijo, el CEUGEA ha sido un puente entre la ciencia, el arte y la sociedad, y hoy más que nunca ese puente necesita seguir fortaleciéndose para responder a los grandes desafíos que enfrenta nuestro planeta”. Por último, felicitó a todas y todos los que han formado parte de esta historia. “Su trabajo ha dejado huella, por ello, les invitamos a vivir esta celebración con alegría, pero también con la convicción de que este momento sea un nuevo punto de partida para redoblar esfuerzos y continuar sembrando conciencia ambiental en las nuevas generaciones”.
Cintia Karina Rojas señaló que “ésta es una fecha que nos llama a la conciencia y a la acción por el medio ambiente y por nuestra casa común: el planeta tierra”. Recordó que este Centro nació como un proyecto visionario, “fruto del compromiso y la sensibilidad de académicas y académicos que comprendieron con claridad que la sustentabilidad no podía seguir siendo una idea marginal, que necesitábamos instituciones comprometidas no sólo con el conocimiento, sino con la transformación social y ambiental”
Desde entonces, comentó, el CEUGEA ha sido un referente de pensamiento crítico, de investigación y acción comprometida; un espacio donde convergen la ciencia, la comunidad, la política pública y el corazón. “Durante estos 25 años, sus aportes han sido significativos. Gracias al CEUGEA, la Universidad de Colima no sólo educa, también transforma; no sólo investiga, también propone y no sólo habla de sustentabilidad y sostenibilidad, la vive, la construye y la comparte”.
“Los tiempos actuales exigen respuestas urgentes, colaborativas y profundamente humanas -dijo por último-, por eso el trabajo del CEUGEA es hoy más relevante que nunca, porque necesitamos ciencia comprometida, ciencia transdisciplinar, necesitamos jóvenes formados con sensibilidad social y ambiental, con sentido de comunidad y amor por la vida. Necesitamos construir comunidades resilientes, equitativas y preparadas para conservar lo que aún puede salvarse, minimizar nuestro impacto ambiental, mitigar nuestra huella ambiental y restaurar lo que ya ha sido degradado”.
Xóchitl Trujillo dijo que “celebrar desde un enfoque científico con el conocimiento usado para la preservación del entorno natural, significa reconocer la importancia que tienen el medio ambiente y la sustentabilidad en el impulso de políticas públicas para la sostenibilidad. Esto lo hace muy bien ya el CEUGEA y quiero felicitarles por estos 25 años en los que se proyectan acciones muy concretas y que se han documentado a lo largo de los años”.
“La implementación de energías renovables, la gestión responsable de los recursos, así como iniciativas que promueven la educación y la participación ciudadana para empoderar a nuestras comunidades -agregó-, creo que ya lo están haciendo muy bien y eso amerita felicitarse. La parte colaborativa, cooperativa y competitiva tendrá que ir con estos fines, para asegurar que dentro de todas nuestras acciones el entorno ambiental sea un eje de la pentahélice que tenemos que valorar al realizar los proyectos donde interviene todo el profesorado y estudiantado”, concluyó.
En su intervención, Francisco Cárdenas, primer director del CEUGEA, relató los inicios del Centro ubicado en la localidad de Nogueras, del municipio de Comala. Agradeció a Fernando Moreno Peña, ex rector de esta Casa de Estudios por la adquisición del casco de la Hacienda Nogueras y relató cómo fue que, gracias a la sensibilidad y visión del rector Carlos Salazar Silva, se promovió también el establecimiento del ecoparque y el Sistema Universitario de Mejoramiento Ambiental (Suma).
Comentó que la limitación de recursos financieros no fue impedimento para llevar a cabo talleres de capacitación a jardineros, estudiantes y maestros, además de la construcción del tortugario y las obras de bambú como la torre lúdica y paradero de autobuses de Nogueras. “El ecoparque, con vegetación apropiada al entorno y las muestras de ecotecnología, han propagado una cultura de protección ambiental a estudiantes e investigadores del occidente de México, y a turistas nacionales y extranjeros mediante visitas guiadas”.
Por último, resaltó la importante labor que realiza la UdeC actualmente en el tema del medioambiente y el compromiso que ha suscrito junto con 20 universidades del país hace unos días, para mitigar el cambio climático.
Respecto a la exposición Visiones Naturales, Mireya Sarahí Abarca Cedeño, ex colaboradora del Centro, comentó que “ésta es una exposición que nace desde la mirada de grandes fotógrafos y fotógrafas: Hernaldo Rivera Cervantes, Juan Franco, Paula Medone, Cecilia Guerrero y Juan Pablo Sánchez, pero que sobre todo apela a nuestra propia mirada, a lo que cada uno, cada una decide ver, valorar y cuidar. Gracias por recordarnos que la belleza está viva, que la naturaleza nos habla y que, si aprendemos a mirar con atención, quizá podamos también aprender a cuidarla mejor”.
“Que esta exposición nos inspire no sólo a contemplar, sino a actuar; no sólo a admirar la vida natural, sino a comprometernos con su defensa, con su cuidado, con la necesidad y urgencia del respeto por la vida, la nuestra y la de cada ser que habita este maravilloso mundo”, finalizó.
El momento artístico estuvo a cargo de alumnos del Bachillerato 27 de Manzanillo.