Desde mi punto de vista  Cochinero electoral

Los comicios del domingo pasado, créame que por ningún motivo tuvieron que ser permitidos, o por lo menos, los que se celebraron en el estado de México a quienes los expertos se refieren como la joya de la corona rumbo a las elecciones de 2017-2018 por tratarse de las presidenciales y por ser la entidad gobernada por la pandilla Peñanietista, pero mucho nos falta legislar en materia electoral para sancionar de manera ejemplar a quien infrinja la ley en ese sentido.

La jornada electoral se distinguió por el cochinero, la trampa y la práctica de las viejas mañas de la política mexicana, quien en cada proceso electoral, nos muestra el lado más ruin de las distintas fuerzas, hasta de esas que por ser nuevas en su registro, actúan igual que aquellos que algún día les merecieron la más dura crítica.

Como usted sabe, la elección del Edomex fue muy cerrada, y seguramente terminarán el PRI y Morena en tribunales, pero desde ahora le anuncio, que es muy difícil que se anule el proceso, no hay forma,  cuando el tricolor y sus satélites todo controlan en aquel estado.

El cochinero en las elecciones mexiquenses, se dio en el marco de entrega de despensas, tinacos y efectivo, y lo que fue peor, con actos de vandalismo en hoteles y denuncias de desapariciones forzadas de unos y otros partidos.

En Coahuila, como sería el cochinero que todavía no es claro el triunfo de Miguel Ángel Riquelme del PRI sobre Guillermo Anaya del PAN, porque ahí se observa un robo flagrante al no contabilizarse una tercera parte de los votos, lo que dio lugar a una marcha por la dignidad.

¿Se acuerda usted de eso aquí en Colima?
Efectivamente, cuando veía por televisión la marcha en Coahuila, recordé que en nuestro estado, ocurrió algo similar tras la elección ordinaria en 2015, donde no había claridad para dar un ganador entre Jorge Luis y el hoy gobernador Nacho Peralta.

Al  escuchar la declaración del presidente nacional del PAN Ricardo Anaya Cortés,  parece que la historia vuelve a repetirse, en Coahuila, se pretende dar un Colimazo, con la complicidad de los órganos electorales inmersos en el proceso, y hay que ver hasta qué grado lo permite el INE.

En Nayarit y Veracruz, parece no habrá mayor problema, debido a la claridad en los triunfos de unos y otros candidatos, que al ser holgados, nos recuerda que existe la urgencia de legislar en el tema de la segunda vuelta.

Mi óptica

Si en las próximas elecciones, los partidos no cambian sus estrategias de campaña, el único ganador será el abstencionismo, ya se vuelve necesario que las fuerzas políticas presenten plataformas de propuestas y no de dádivas electoreras, así como también urge que los distintos niveles de gobierno, dejen de ejercer prácticas paternalistas con la ciudadanía que en nada le abonan al crecimiento del país.

Por cierto

Los ayuntamientos colimenses, cumplen poco a poco por lo indicado por el Congreso Local, y ayer, fue el cabildo capitalino quien ya aprobó la reforma en materia electoral que presentó la semana pasada el poder legislativo.

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